sábado, 25 de junio de 2011
En la vida pasas por muchas cosas, cosas que al principio ves de una manera y poco a poco las vas viendo diferentes. Esa muñeca de trapo, saltar a la comba, cuidar ese nenuco... Eran tu mayor importacia, y tu mayor preocupacion era que tu madre te castigara sin juguetes... Y esque aveces todo parecía tan fácil... Soñabas con ser `mayor´... Pero a medida que va pasando el tiempo te vas dando cuenta de que no todo es tan fácil. Cámbias tus muñecas y nenucos por un móvil o vestido nuevo. Conoces gente nueva, sales. Y otras cosas pasan a ser tu mayor importacia: tus amigos, te das cuenta de lo que es la amistad, de que no todos los que ponen buena cara son amigos, te llevas muchas decepciones, pero aprendes, aprendes que amigos de verdad hay pocos pero merecen la pena, y esque ellos son los únicos que nuncan te fallan y siempre estan hay en los momentos buenos y más difíciles. Conoces chicos, te lo pasas bien, te ríes parece fácil. ¿Por que digo parece? Porque esos chicos son pasatiempos y todavía no ha llegado él. Al princio piensas que será otro que viene y se va sin importante, sin preocuparte, sin derramar una lágrima, pero cuando llega todo cambia, hasta tu forma de ver las cosas, tu forma de pensar, te das cuenta de que esta vez no sientes lo mismo. Me resulta imposible llegar a explicar con palabras, por que no es una explicación cualquiera, ni si quiera se puede preguntar porque tampoco tiene respuesta. ¿Pero entonces como lo sabes? Simplemente lo sabes al igual que sabes cuando estas contenta, triste, enfadada, porque... ¿Como se explica un sentimiento? No lo sé, solo sé que cada vez que abro el móvil y veo una llamada perdida suya se me pone una sonrisa en la boca, cuando me manda un mensaje esa sonrisa ya no se borra en todo el dia, cuando por cualquier cosa insignificante te acuerdas de él, y todo te hace recordar algunos de los momentos que pasasteís juntos, o algunas de las miradas, besos o caricias que en algun momento determinado te dio... Por que se me pone un cosquilleo en la tripa cada vez que ablo de él, cada vez que le voí a ver cada vez que me dice un te quiero, cada vez que se me pasa por la cabeza. Y solo pensar que el cuento se acaba te llena los ojos de lagrimas, pensar que dejaras de ser la princesa de esta historia.
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